CONSEJOS A LA HORA DE SOLICITAR UNA HIPOTECA

Cuando vas a comprar tu casa vas a pensar en muchas cosas, el precio de compra y los gastos que ello conlleva, el tamaño, el edificio, su ubicación, la decoración, los servicios de la zona y todos los tramites que ello conlleva. 

Esto va a impactar tu futuro financieramente hablando en un tiempo importante, así que es importante que tomes buenas decisiones en la financiación de tu casa.

Para planificar la hipoteca que puedes solicitar a la entidad financiera también tienes que saber cuanto dinero puedes pagar cada mes, o lo que los bancos dicen o llaman el endeudamiento personal. 

En este caso tienes que saber que lo ideal es que no te endeudes por encima de un 33% de los ingresos totales de la unidad familiar.

Cuando buscas comprar una casa a través de una hipoteca, lo ideal es que según el importe que vas a poder destinar al pago mensual elijas el valor de compra de la vivienda, ya que de esta manera podrás ver la horquilla de precios en los que te podrás mover, de esta manera podrás localizar más cómodamente tu vivienda.

¿QUE ES UNA HIPOTECA?

Una hipoteca es un producto financiero ofrecido por bancos y cajas de ahorro, que permite que el cliente reciba una cantidad de dinero destinado a la compra de un inmueble.

Las Garantías:

El inmueble y la garantía personal propia del cliente en el cumplimiento de sus obligaciones. Todo esto a cambio de devolver, a través de una cuota periódica, la hipoteca concedida junta con los intereses generados.

Las entidades financieras para asegurarse el pago del préstamo, además aceptan como garantía especial el inmueble, realizando una hipoteca sobre este, por ello se le denomina préstamo hipotecario.

¿Quien puede conceder una Hipoteca?

Un préstamo hipotecario puede ser concedido por una persona física o jurídica, pero lo habitual y natural es que sean Entidades Financieras quien las concedan, normalmente son Bancos y Cajas, ya que estas están sujetas a la supervisión del Banco de España.

Tipos de Préstamos:

Hipoteca a interés fijo: El tipo se mantiene constante durante toda la vida del préstamo.

Hipoteca a interés variable: Estos se revisan y actualizan periódicamente de acuerdo a los índices de referencia.

Hipoteca a interés mixto: Al principio es un tipo fijo y al final se pasa a uno variable.